Pero en aquel día, así como sucedió en tiempo de la destrucción de Jerusalén, el pueblo de Dios será librado, porque serán salvos todos aquellos cuyo nombre esté “inscrito para la vida”. Isaías 4:3 (VM). Nuestro Señor Jesucristo anunció que vendrá la segunda vez para llevarse a los suyos: “Entonces se mostrará la señal del Hijo del hombre en el cielo; y entonces lamentarán todas las tribus de la tierra, y verán al Hijo del hombre que vendrá sobre las nubes del cielo, con grande poder y gloria. Y enviará sus ángeles con gran voz de trompeta, y juntarán sus escogidos de los cuatro vientos, de un cabo del cielo hasta el otro”. Mateo 24:30, 31. Entonces los que no obedezcan al evangelio serán muertos con el aliento de su boca y destruidos con el resplandor de su venida. 2 Tesalonicenses 2:8. Así como le sucedió antiguamente a Israel, los malvados se destruirán a sí mismos, y perecerán víctimas de su iniquidad. Debido a su vida pecaminosa los hombres se han apartado tanto del Señor y tanto ha degenerado su naturaleza con el mal, que la manifestación de la gloria del Señor es para ellos un fuego consumidor. CS 35.1
Deben guardarse los hombres de no menospreciar el aviso de Cristo respecto a su segunda venida; porque como anunció a los discípulos la destrucción de Jerusalén y les dio una señal para cuando se acercara la ruina, así también previno al mundo del día de la destrucción final y nos dio señales de la proximidad de esta para que todos los que quieran puedan huir de la ira que vendrá. Dijo Jesús: “Y habrá señales en el sol, y en la luna, y en las estrellas; y sobre la tierra angustia de naciones”. Lucas 21:25 (VM); Mateo 24:29; Apocalipsis 6:12-17. “Cuando viereis todas estas cosas, sabed que está cercano, a las puertas”. Mateo 24:33. “Velad pues” (Marcos 13:35), es la amonestación del Señor. Los que le presten atención no serán dejados en tinieblas ni sorprendidos por aquel día. Pero los que no quieran velar serán sorprendidos, CS 35.2
porque “el día del Señor vendrá así como ladrón de noche”. 1 Tesalonicenses 5:1-5. CS 35.2
El mundo no está hoy más dispuesto a creer el mensaje dado para este tiempo de lo que estaba en los días de los judíos para recibir el aviso del Salvador respecto a la ruina de Jerusalén. Venga cuando venga, el día de Dios caerá repentinamente sobre los impíos desprevenidos. El día menos pensado, en medio del curso rutinario de la vida, absortos los hombres en los placeres de la vida, en los negocios, en la caza al dinero, cuando los guías religiosos ensalcen el progreso y la ilustración del mundo, y los moradores de la tierra se dejen arrullar por una falsa seguridad, entonces, como ladrón que a media noche penetra en una morada sin custodia, así caerá la inesperada destrucción sobre los desprevenidos “y no escaparán”. Vers. 3. CS 36.1
Casualmente en estos dias encontré un audio que hicieron en youtube basado en un folleto que preparó un amigo mio muchos años atrás. Lo sacaron de mi página lo grabaron en otro sitio y prepararon
el audio, que no escuché completamente, pero ya habia leido el libro, porque mi amigo me los enviaba para corregir los errores ortográficos, y entiendo que ese también. Es prácticamente el mismo libro, o basado en el; o sea, en ciertos casos de paréntesis se hizo unos cambios para que se entendiera mejor el mensaje. Y me alegro de encontrarlo porque lo que hicieron creo que costó trabajo. Y lo voy a compartir por aqui.